entre proyectos antagónicos, las cuales se enmarcan en la lucha del poder por el poder mismo.
Al dar su mensaje con motivo de su Quinto Informe de Gobierno, el mandatarios mexiquense aseveró que la búsqueda del poder por el poder mismo es una forma de autoritarismo.
“La delincuencia no es el único riesgo que enfrenta el país, hay otra grave amenaza: la lucha del poder por el poder mismo, que desvirtúa la democracia, al gobierno y a sus instituciones. Se promueve una democracia sin contenido, donde por el solo fin de obtener el poder se negocian alianzas entre proyectos antagónicos.
“Seamos claros, el poder por el poder mismo es una forma de autoritarismo, tiende a reducir las opciones de la gente y lesiona el espíritu de la democracia”, aseveró.
Además, Peña Nieto criticó a quienes consideran como una regresión la llegada de un partido distinto al que actualmente ostenta la presidencia.
“México ya vivió una transición política, los mexicanos dimos un paso decisivo hacia la pluralidad, con plena competencia y reglas iguales para todos. Si los partidos contribuyeron y participaron en esa transición, no se puede excluir ni descalificar a ninguno. Es falaz y doloso hacer creer que la llegada de un partido distinto al que actualmente ostenta la Presidencia de la República sea una regresión de nuestra democracia”, declaró.
Luego de entregar el informe de su quinto año de gestión al frente del estado de México ante el Congreso de la entidad, Peña Nieto se trasladó al teatro Morelos, donde dio un discurso en el que resumió los logros de su gestión, pero que también contuvo un mensaje político.
Sobre las elecciones que se realizarán el próximo año en el estado de México, Peña reiteró que se mantendrá alejado.
“El próximo año viviremos un nuevo proceso electoral. Estoy seguro que los mexiquenses nos apegaremos escrupulosamente a las reglas de la democracia, demostrando que la pluralidad y la unidad son plenamente compatibles. Como gobernador, dentro del marco de la ley y con imparcialidad, contribuiré a que las elecciones se realicen en un marco de estabilidad, armonía y paz social”, dijo.
En su mensaje cuestionó el manejo de la economía a nivel nacional debido a la caída en varios indicadores; sin embargo, rechazó el calificativo de “Estado fallido” que se le puso al país.
“De 2000 a 2009 México registró el crecimiento más bajo de las últimos ocho décadas. De 183 países, ocupamos el lugar 157 en crecimiento acumulado, y ya no pertenecemos al grupo de las 10 economías más grandes del mundo (…). Tanto el desempeño interior como nuestra política exterior no han podido evitar que México se rezague y pierda liderazgo, particularmente en América Latina. Hay voces que incluso han descalificado al país, al grado de considerarlo un Estado fallido. No comparto este señalamiento. Es más bien la falta de acuerdos y el aplazamiento de decisiones fundamentales lo que ha provocado la ausencia de logros trascendentes”, aseveró Peña Nieto en su mensaje.
De nueva cuenta, el mandatario mexiquense señaló que es necesario rediseñar las estructuras del país, especialmente durante los festejos con motivo del Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución mexicana.
“Afrontemos nuestra responsabilidad histórica. En el Bicentenario de la Independencia y en el Centenario de la Revolución, México debe ir más allá de la transición política y plantearse desde ahora, desde ahora, una transición para el desarrollo de largo plazo. La nación tiene la gran oportunidad de rediseñarse, de cambiar a fondo, de dejar atrás fórmulas y estilos anacrónicos. Es imprescindible vencer inercias y emprender las transformaciones que los mexicanos exigen”, añadió.
En su visita al Congreso, Peña Nieto aseguró que en esta Legislatura “se sabe hacer política” y prueba de ello es que 80 por ciento de las iniciativas han sido votadas por unanimidad, lo que demuestra que ha prevalecido el interés general por encima de los intereses partidistas.
El mandatario escuchó cada uno de los posicionamientos de los partidos representados en el Congreso y ahí reconoció que la entidad no ha estado exenta de la escalada de violencia del país.
“El estado de México ha venido trabajando sus poderes, los distintos niveles de Gobierno, en un clima adverso, por la escalada de violencia que observamos generalizada en el país, y por supuesto, eso nos lleva a asumir mayores responsabilidades, un mayor desafío ante el clima de inseguridad que observamos en todo el país, y donde el estado de México no escapa a esta circunstancia”, manifestó el gobernador.
Al informe de Peña Nieto acudieron el secretario de Gobernación, los gobernadores de Yucatán, Campeche, Coahuila, Colima, Chihuahua, Hidalgo, Nuevo León, Oaxaca, Querétaro, Quintana Roo, San Luis Potosí y Sinaloa, así como el jefe de Gobierno del DF, la dirigente del PRI, Beatriz Paredes, diputados y senadores priístas, gobernadores electos de varias entidades y el rector de la UNAM, José Narro, entre otros.
Al dar su mensaje con motivo de su Quinto Informe de Gobierno, el mandatarios mexiquense aseveró que la búsqueda del poder por el poder mismo es una forma de autoritarismo.
“La delincuencia no es el único riesgo que enfrenta el país, hay otra grave amenaza: la lucha del poder por el poder mismo, que desvirtúa la democracia, al gobierno y a sus instituciones. Se promueve una democracia sin contenido, donde por el solo fin de obtener el poder se negocian alianzas entre proyectos antagónicos.
“Seamos claros, el poder por el poder mismo es una forma de autoritarismo, tiende a reducir las opciones de la gente y lesiona el espíritu de la democracia”, aseveró.
Además, Peña Nieto criticó a quienes consideran como una regresión la llegada de un partido distinto al que actualmente ostenta la presidencia.
“México ya vivió una transición política, los mexicanos dimos un paso decisivo hacia la pluralidad, con plena competencia y reglas iguales para todos. Si los partidos contribuyeron y participaron en esa transición, no se puede excluir ni descalificar a ninguno. Es falaz y doloso hacer creer que la llegada de un partido distinto al que actualmente ostenta la Presidencia de la República sea una regresión de nuestra democracia”, declaró.
Luego de entregar el informe de su quinto año de gestión al frente del estado de México ante el Congreso de la entidad, Peña Nieto se trasladó al teatro Morelos, donde dio un discurso en el que resumió los logros de su gestión, pero que también contuvo un mensaje político.
Sobre las elecciones que se realizarán el próximo año en el estado de México, Peña reiteró que se mantendrá alejado.
“El próximo año viviremos un nuevo proceso electoral. Estoy seguro que los mexiquenses nos apegaremos escrupulosamente a las reglas de la democracia, demostrando que la pluralidad y la unidad son plenamente compatibles. Como gobernador, dentro del marco de la ley y con imparcialidad, contribuiré a que las elecciones se realicen en un marco de estabilidad, armonía y paz social”, dijo.
En su mensaje cuestionó el manejo de la economía a nivel nacional debido a la caída en varios indicadores; sin embargo, rechazó el calificativo de “Estado fallido” que se le puso al país.
“De 2000 a 2009 México registró el crecimiento más bajo de las últimos ocho décadas. De 183 países, ocupamos el lugar 157 en crecimiento acumulado, y ya no pertenecemos al grupo de las 10 economías más grandes del mundo (…). Tanto el desempeño interior como nuestra política exterior no han podido evitar que México se rezague y pierda liderazgo, particularmente en América Latina. Hay voces que incluso han descalificado al país, al grado de considerarlo un Estado fallido. No comparto este señalamiento. Es más bien la falta de acuerdos y el aplazamiento de decisiones fundamentales lo que ha provocado la ausencia de logros trascendentes”, aseveró Peña Nieto en su mensaje.
De nueva cuenta, el mandatario mexiquense señaló que es necesario rediseñar las estructuras del país, especialmente durante los festejos con motivo del Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución mexicana.
“Afrontemos nuestra responsabilidad histórica. En el Bicentenario de la Independencia y en el Centenario de la Revolución, México debe ir más allá de la transición política y plantearse desde ahora, desde ahora, una transición para el desarrollo de largo plazo. La nación tiene la gran oportunidad de rediseñarse, de cambiar a fondo, de dejar atrás fórmulas y estilos anacrónicos. Es imprescindible vencer inercias y emprender las transformaciones que los mexicanos exigen”, añadió.
En su visita al Congreso, Peña Nieto aseguró que en esta Legislatura “se sabe hacer política” y prueba de ello es que 80 por ciento de las iniciativas han sido votadas por unanimidad, lo que demuestra que ha prevalecido el interés general por encima de los intereses partidistas.
El mandatario escuchó cada uno de los posicionamientos de los partidos representados en el Congreso y ahí reconoció que la entidad no ha estado exenta de la escalada de violencia del país.
“El estado de México ha venido trabajando sus poderes, los distintos niveles de Gobierno, en un clima adverso, por la escalada de violencia que observamos generalizada en el país, y por supuesto, eso nos lleva a asumir mayores responsabilidades, un mayor desafío ante el clima de inseguridad que observamos en todo el país, y donde el estado de México no escapa a esta circunstancia”, manifestó el gobernador.
Al informe de Peña Nieto acudieron el secretario de Gobernación, los gobernadores de Yucatán, Campeche, Coahuila, Colima, Chihuahua, Hidalgo, Nuevo León, Oaxaca, Querétaro, Quintana Roo, San Luis Potosí y Sinaloa, así como el jefe de Gobierno del DF, la dirigente del PRI, Beatriz Paredes, diputados y senadores priístas, gobernadores electos de varias entidades y el rector de la UNAM, José Narro, entre otros.