Lo hago con profunda emoción política y plena conciencia de la responsabilidad que asumo.
Lo hago convencido de que hoy inicia una nueva etapa para la vida de Veracruz.
Inicia una nueva ruta en las transformaciones del Estado; nuevas esperanzas, nuevos compromisos y un gobierno dispuesto a aportar lo mejor de sí para llevar a Veracruz a un horizonte de prosperidad.
Las responsabilidades que hoy adquiero, surgen de la voluntad libre y soberana de los ciudadanos expresada en las urnas.
La transmisión del Poder Ejecutivo se lleva en paz y en orden.
Avanza así nuestra democracia y se fortalecen las instituciones con que contamos los veracruzanos.
Vivimos en un Estado de leyes y libertades que juntos los mexicanos hemos consolidado a doscientos años de nuestra Independencia y cien de la Revolución.
El gobierno que encabezo marcará su actuar con un desempeño responsable, serio y eficaz.
Mi compromiso, en adelante, será sólo con los veracruzanos. A ellos me debo y a ellos sabré responder.
Es justo reconocer la entrega y el servicio realizado de quienes en su momento supieron dirigir los destinos de nuestro Estado.
A don Miguel Alemán Velazco, presente aquí, Veracruz lo recuerda con agradecimiento y afecto.
De Fidel Herrera recibo un gobierno que actuó siempre con enorme energía y entrega en favor de las mujeres y hombres veracruzanos.
Con el gobernador Herrera el Estado registró una de las mayores transformaciones sociales de la que tengamos memoria.
Gracias siempre a Fidel Herrera y a Rosa Borunda de Herrera.
Inicia hoy una nueva etapa para Veracruz.
La que viene es una etapa a la que corresponderán profundas transformaciones económicas y sociales, una etapa que exige actuar a tiempo y actuar bien.
Que exige lo mejor de nosotros, pero también exige de preparación para poder construir un mejor destino.
Veracruz cambia a pasos vertiginosos. Nuevos retos y nuevas necesidades de la gente obligan a prontas y mejores respuestas.
Como gobierno tenemos que encabezar esos cambios antes de que los cambios nos dejen atrás.
El gobierno que hoy comienza tiene claridad de rumbo y de metas; estamos conscientes de los compromisos asumidos y de las acciones que serán necesarias para pasar del compromiso a las realizaciones.
Haremos un gobierno capaz de atender las necesidades de la gente, un gobierno sustentado en principios sociales, en valores; ejerceré un gobierno de acciones firmes y siempre respetuoso de la ley.
En nuestro actuar trascenderemos lo inmediato. Habrá temas que requieran de pronta respuesta; otros que quizá nos lleven más tiempo pero tengan la seguridad que empezaremos a trabajar en ellos empezando ya.
Será un gobierno con visión de futuro. Un gobierno con metas y acciones ordenadas de corto, mediano y largo plazos.
Hemos avanzado mucho en los últimos años. Así lo atestiguan las grandes obras de infraestructura, las realizaciones en el marco de la atención social y en la consolidación de productos reconocidos dentro y fuera del país.
Pero tenemos que acelerar, como nunca antes, en las acciones necesarias para transformar nuestra realidad. Tenemos que reconocer lo mucho que falta por hacer.
No podemos ser ajenos a las condiciones de pobreza y desigualdad que aún privan en muchas de nuestras regiones; tampoco a la falta de empleo y oportunidades que afecta a un gran número de mujeres y hombres veracruzanos.
Existen grandes necesidades en cuanto a servicios públicos básicos, a salud, atención social, a educación, a condiciones que requiere nuestra gente para elevar su calidad de vida.
No somos ajenos al reclamo de las familias que quieren sentirse tranquilas y seguras.
El que muchas de las insuficiencias sean reflejo de lo que sucede en el ámbito mundial y nacional no da motivo para permanecer inmóviles ni para esperar complacientes a que vengan tiempos mejores.
Si nuestro compromiso es con la construcción de un Estado próspero estamos obligados a reconocer nuestra realidad, las oportunidades y las vocaciones.
Tenemos que prepararnos mejor para vencer las amenazas, para poder dar respuesta con acciones eficaces a aquello que requiere nuestra atención.
Me comprometo a que nuestro actuar estará siempre enfocado a responder a las expectativas de los millones de personas que queremos seguir avanzando bajo un Estado fuerte y justo.
Debemos conciliar el potencial que tenemos como Estado con las condiciones de vida de nuestra gente.
Hoy como gobierno convoco a todos los veracruzanos a construir una ambiciosa agenda que haga realidad un Veracruz socialmente justo y económicamente eficaz.