Próspero Aparicio Miranda
El Dr. Javier Duarte de Ochoa, gobernador de Veracruz, tiene un gran compromiso con el pueblo veracruzano, como testigo cercano de esas prácticas inmorales de gente que decía “QUERER MUCHO A VERACRUZ” y no importando el partido político por el que llegaron, debe coadyuvar para que esa historia no se repita con los actuales y todos aquellos que se convirtieron en delincuentes o ya eran. El pueblo EXIGE que sean llevados a los tribunales, de ser culpables que le devuelvan al Estado lo que le pertenece, esas aberrantes prácticas no se deben permitir en un Estado donde la pobreza es mayor cada día.
Si de verdad Duarte de Ochoa tiene la visión de Un Estado de Veracruz Próspero debe limpiar la casa de adentro hacía afuera, porque las ratas, cucarachas y alimañas le hacen mucho daño al pueblo, es por eso que el ORFIS y sus secuaces también deben ser llamados por la justicia para que expliquen “tantos descuidos” en los que incurrieron y que les permitieron a los infieles servidores del pueblo su inmerecida riqueza.
No se puede ver un futuro progresista y lleno de prosperidad, no puede haber desarrollo y abatimiento de la gran pobreza veracruzana con la indolente mentalidad de hacer lo mejor por lo demás, en perjuicio de quienes somos.
El pueblo no es ajeno a ésta dramática historia, también tiene su parte de culpabilidad porque se presta al juego perverso de quienes se dicen servidores al aceptar todo tipo de regalos y billete en efectivo por emitir su voto, no se ponen a reflexionar que al entrar en ese juego el resultado será el robo al dinero del erario y se hace cómplice permanente de las malas actitudes de la comuna en funciones.
Duarte de Ochoa proviene de una familia cuyos principios morales y éticos son fundamentales, si aplica esa doctrina en su quehacer político no hay duda que éstos seis años de su gobierno serán de PROGRESO y PROSPERIDAD.
Por sus comentarios: Gracias.
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