El senador panista Juan Bueno Torio presentó una iniciativa para establecer que Petróleos Mexicanos (Pemex) garantice la máxima recuperación de los hidrocarburos del subsuelo y gas asociado que son propiedad de la nación.
De acuerdo con la propuesta del subcoordinador de Política Económica del GPPAN, el Consejo de Administración de Pemex deberá cuidar que los recursos petroleros que se encuentran en el subsuelo se extraigan con las tecnologías adecuadas que garanticen la máxima recuperación, a la vez que se deberá salvaguardar al medio ambiente.
Asimismo, la iniciativa plantea que el Comité de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable tendrá la función de vigilar que durante el desarrollo de campos petroleros se recupere al máximo el gas asociado y, en su caso, la quema de gas se realice de acuerdo con prácticas internacionales que procuren el medio ambiente, así como entregar un informe anual al Consejo de Administración sobre las acciones realizadas.
El Legislador, integrante de la Comisión de Energía, dijo que “por falta de inversiones para aprovechar el gas natural que se envía a la atmósfera en los procesos de extracción de hidrocarburos, la cantidad de esa pérdida asciende a los tres mil millones de dólares en gas durante los últimos cinco años, recursos propiedad de la nación que se han dilapidado”.
Además, agregó Bueno Torio, se dejan hidrocarburos en el subsuelo debido a la práctica operativa más común en la industria petrolera, que afecta el factor de recuperación final de los yacimientos, y que está relacionada con la falta de aplicación de métodos de recuperación secundaria o mejorada a la explotación de los mismos.
“Los proyectos de recuperación secundaria y mejorada se ven desplazados o pospuestos por los nuevos desarrollos que ofrecen mayor rentabilidad de corto plazo, además de que la aplicación de métodos de recuperación secundaria de manera tardía a los campos, han sido factores para obtener menores recuperaciones finales”, expuso el Legislador veracruzano.
Recordó que, por un lado, la producción petrolera alcanzó su máximo en 2004, cuando se produjeron 3 mil 825 millones de barriles diarios (b/d) de hidrocarburos líquidos, mientras en 2011 la producción disminuyó 30 por ciento, al pasar a 2 mil 954 millones de b/d, además de que la mayor parte de la producción provino de campos en etapa de declinación, con grandes retos tecnológicos y de operación.
Por otro lado, continuó, la demanda creciente de petrolíferos disminuye el saldo de la balanza comercial de petróleo, pues mientras en 2003 llegó a su máximo de mil 754 millones de barriles diarios (mbd), para 2011 alcanzó sólo los 706 mbd, es decir, una disminución de 148 por ciento.
Asimismo, mientras en 2011 se exportaron mil 336 mbd de petróleo crudo con un valor de 28 mil 333 millones de dólares, para satisfacer la demanda interna de petrolíferos se destinaron 16 mil 871 millones de dólares a la importación.
Además, el déficit de gas natural también se ha incrementado, pues para 2009 llegó a mil 258 millones de pies cúbicos diarios (mmpcd) y 2010 se estima que llegue a mil 300 mmpcd. Si consideramos las divisas requeridas para la importación nacional de gas natural, se requieren destinar los ingresos de 736 mbd de petróleo crudo para cubrir los déficit de petrolíferos y gas natural, casi 55 por ciento del volumen exportado.
Actualmente México tiene 223 campos productores de aceite y gas asociado, de los cuales 177 se encuentran en declinación o próximos a estarlo en los siguientes dos años y de los 46 campos en desarrollo, 29 pertenecen a Chicontepec, que también ya va en declinación, indicó el Legislador.
A lo anterior se suma que la incorporación de reservas ha sido menor que los ritmos de extracción, por lo que decrecen año con año, además de que no se han descubierto grandes yacimientos para revertir la tendencia de la producción en el mediano plazo, expuso.
Bueno Torio argumentó que mientras en otros países se invierten recursos en tecnología para aprovechar el gas natural y extraer la mayor cantidad de hidrocarburos del subsuelo y utilizan el petróleo como detonante de la industria de transformación, en México Petróleos Mexicanos no está obligada a cumplir ese precepto, lo que de cumplirse contribuiría a garantizar la seguridad energética de esta y las futuras generaciones.
Por lo anterior, la iniciativa plantea reformar la Ley de petróleos Mexicanos para “garantizar la máxima recuperación de los hidrocarburos del subsuelo que son de propiedad de la nación, la cual incluirá la reevaluación del factor de recuperación de los campos actuales por la utilización de sistemas de recuperación secundaria y mejorada”.
La iniciativa se turnó a las comisiones unidas de Energía y Estudios Legislativos para su análisis y dictamen correspondiente.