PEN INTERNATIONAL HACE UN LLAMADO PARA FRENAR LA GUERRA CONTRA PERIODISTAS, ESCRITORES Y BLOGUEROS EN MÉXICO

México es uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo. Desde el año 2000, por lo menos 67 periodistas, escritores y blogueros han sido asesinados; 12 permanecen desaparecidos; un sinnúmero han sido amenazados y hostigados, y cada vez más frecuentemente los medios son atacados con armas de fuego o explosivos.
  A pesar de sus obligaciones constitucionales e internacionales, en México se continúan violando los derechos humanos de periodistas y escritores. 
Los derechos violados incluyen el derecho a la vida, así como el derecho a no ser torturado, al trabajo y a la libertad de expresión.
  Los crímenes cometidos contra periodistas no son investigados adecuadamente y las autoridades han fallado en investigar y sancionar efectivamente por lo menos el 90% de los casos.  
A pesar de su nombre, el Fiscal Especial para la Atención de los Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión no tiene competencia para investigar los crímenes ni presentar cargos, o combatir casos vinculados con organizaciones relacionadas con el narcotráfico. 
  Existe una red de normas que limitan la expresión y la denuncia de actos de corrupción. 
Catorce estados en el país mantienen leyes que criminalizan la expresión. 
Las normas de difamación civil (o daño moral) son utilizadas para hostigar a periodistas que revelan corrupción. 
El marco regulatorio obstaculiza la diversidad de medios favoreciendo la concentración.