Se deben convertir las desgracias en ventajas competitivas y oportunidades de desarrollo, afirmaEl senador panista Juan Bueno Torio solicitó hoy a la Cámara de Diputados destine una partida presupuestal de 375 millones de pesos a fin de mitigar los daños por inundaciones en diversos municipios y comunidades de la cuenca del río Papaloapan en el estado de Veracruz, así como para realizar estudios en esa zona.Mediante un punto de acuerdo, el legislador por Veracruz pidió a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados que en el Presupuesto de Egresos de la Federación para 2011 destine 375 millones de pesos para el Organismo de Cuenca Golfo Centro a cargo de la Comisión Nacional del Agua, de los cuales 33 millones serán destinados para realizar estudios y 342 millones de pesos para realizar obras que reparen los daños causados por las inundaciones en diversos municipios del estado. 
Asimismo, solicitó a la Comisión Nacional del Agua acelerar los estudios hidrológicos de las cuencas de los ríos Coatzacoalcos, Jamapa, Tecolutla, Cazones, Tuxpan y Pánuco para definir y establecer "a la brevedad posible las obras de infraestructura que eviten y/o prevengan, inundaciones ocasionadas por el cambio climático.Bueno Torio indicó que en los últimos años las lluvias intensas y sus consecuentes inundaciones cada vez se presentan provocando mayores afectaciones al estado de Veracruz principalmente en las zonas en donde se ubican las cuencas de los ríos Coatzacoalcos, Papaloapan, Jamapa, Cazones, Tuxpan, Pánuco, Uxpanapa y Grijalva.Por ejemplo, continuó, "el reciente fenómeno meteorológico ocasionado por la onda tropical número 24 ha causado hasta el día de hoy estragos inéditos dejando un saldo que esta cerca de las 100 mil personas damnificadas en 50 municipios por el desbordamiento de al
menos 17 ríos y 11 arroyos.Como consecuencia de estos desbordamientos, prosiguió el legislador federal, más de 24 mil viviendas resultaron afectadas, además de 80 escuelas, 78 tramos carreteros y 28 puentes con afectaciones severas dejando cerca de 100 mil damnificados de los cuales más de 10 mil fueron albergados, también se registraron daños en cultivos de caña de azúcar, maíz y pastos para la ganadería y se han perdido miles de cabezas de ganado vacuno, ovino, bovino, entre otros.Más allá de los montos económicos y las dudas que surgen respecto a la dinámica de recuperación en los estratos más vulnerables, lo cierto es que se requerirán de apoyos continuados de los tres órdenes de gobierno, también es cierto que estos fenómenos se están repitiendo año con año y cada vez con mayor intensidad como lo muestra la cronología de los sucesos en los últimos 10 años; además de las inundaciones que enfrentamos se suma el problema que ocasiona la suspensión de actividades afectando notablemente la generación de empleos y alterando la calidad de vida de los veracruzanos, que con temor esperan la llegada de la época de lluvias."México requiere de acciones definitivas que permitan enfrentar los retos de una nueva realidad derivada del cambio climático, por lo que tenemos la obligación de convertir las desgracias derivadas de los fenómenos meteorológicos como las pasadas in
undaciones en el estado de Veracruz, en ventajas competitivas y de mayores oportunidades de bienestar y desarrollo para los veracruzanos", precisó.Ahora, dijo, la estrategia prioritaria debe ser actuar sobre la reducción del riesgo y la disminución de la vulnerabilidad de las poblaciones.Bueno Torio reconoció que aún cuando ha habido importantes avances en materia institucional para modificar el enfoque acerca del riesgo y lo desastres, y pasar del énfasis en la respuesta al énfasis en el desarrollo con inclusión de gestión del riesgo, los cambios en la realidad no han estado a la altura de las necesidades.
