En estos momentos en que el estado de Veracruz vive la peor tragedia de su historia, y en donde el esfuerzo de todas las autoridades así como la sociedad civil se han volcado para sacar de la tragedia a más de un millón de habitantes, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) está cobrando en zonas urbanas y rurales tarifas nunca vistas.
Ya sabe, los recibos traen la leyenda “páguese antes de tal día, si no se cortará el servicio”. La empresa que se autonombra de “clase mundial” está fuera de foco; insensibles a la tragedia; contrarios a la ayuda que manda el presidente Calderón, pero sobre todo, en qué se basa para cobrar tan altas las tarifas en poblados damnificados en donde no tienen luz hace más de un mes, además que no hay aires acondicionados, ni motores.
Fíjense amable lector: todavía hay poblados sin energía eléctrica, simplemente porque no se dan abasto los trabajadores de la CFE, pero que eficientes es el departamento de cobro, porque con todo y caminos cortados ya llegaron los recibos.
Esto que se narra causó la indignación de la señora Rosa Margarita Borunda de Herrera, quien pidió a la CFE que se pongan las pilas y reclasifiquen las tarifas que subieron no sólo al doble, sino al triple de lo que se pagaba. Remató en un reportaje de TELEVISA Veracruz, diciendo la primera dama: “Les cobran mil pesos, que con esa cantidad comen un mes”. Duro y a la cabeza.
Las altas tarifas en la entidad de la CFE es un viejo reclamo de los jarochos, porque se consume más energía por los niveles de humedad. En Veracruz se tiene la única planta nuclear llamada “Laguna Verde”, ubicada en el municipio de Alto Lucero, en el centro de la entidad. Así mismo, existen 4 termoeléctricas en el puerto de Tuxpan.
Los veracruzanos sufrimos la irresponsabilidad de la Comisión Nacional del Agua al desfogar las presas en Oaxaca que inundan la cuenca del Papaloapan: en esas presas se produce energía eléctrica.
La CFE todavía tiene varios lugares como la caída de la cascada de Eyipantla en los Tuxtlas, la de Texolo en Xico, y en Las Minas cerca de Perote, centro de producción de energía. PEMEX, gracias al agua del río Uxpanapa en Minatitlán, se dota de energía eléctrica a la refinería y a los complejos petroquímicos en Cosoleacaque, Coatzacoalcos y Nanchital.
Para finalizar, el gobierno federal con la CFE, han estado sordos al reclamo de millones de veracruzanos y la situación se pone peligrosa en la región indígena de Soteapan en el sur y en los poblados cercanos a la planta de Laguna Verde, quienes ya no pagan luz, precisamente por el alto costo de la energía eléctrica.
Lo más desagradable de este asunto es que los trabajadores y empleados de confianza de la CFE, quienes ordenan y ejecutan los cortes de energía, no pagan un centavo de energía eléctrica por lo que sus hogares están llenos de aparatos eléctricos.
No compran gas porque se bañan con regaderas eléctricas y tienen estufas eléctricas, aparte que sus casas están llenas de focos como si vivieran una eterna navidad.
¿No que dice la constitución de la república que todos los mexicanos somos iguales? ¿Iguales? ¿Dónde?
